Torres de cristal, un problema de modernidad en las ciudades

Las construcciones modernas intentan sobresalir o camuflarse con el paisaje. En el caso de las torres de cristal pueden hacer ambas, depende en el lugar en el que se construyan. Pero a veces no todos están de acuerdo con ellas. Justin Davidson sostiene que son malas para la vida en la ciudad.

¿Cuáles fueron los motivos para llegar a esta conclusión?

Durante varios años las construcciones de edificios de cristales eran un símbolo de modernidad y tecnología. Pero con el tiempo, se han convertido en tema de debate entre especialistas de la arquitectura. Entonces… ¿Son muestras de progreso y modernismo o cajas transparentes frías que reflejan la simpleza de la estética actual?

En pleno auge, decenas de edificios transparentes adornaban el horizonte de grandes ciudades. Incluso, el New York Times o las tiendas Apple, mostraban en sus construcciones innovación y creatividad. Pero…

¿Por qué las torres de cristal son malas para la ciudad?

En su charla TED, Justin Davidson, condena la utilización del cristal en las construcciones.

Sostiene que la historia de las ciudades y la necesidad de refugio esta ligada al deseo humano de belleza. Hay ciudades llenas de asperezas, texturas, sombras y colores que reflejan individualidad y carácter. En muchas ocasiones no son palacios ni catedrales, simplemente casas ordinarias que reflejan la historia de ese lugar.

Solamente con pasar los dedos sobre el ladrillo de una fachada, nos brinda una experiencia multisensorial y multidimensional de las ciudades. En cambio, el cristal no envejece de la misma manera y puede reemplazarse más fácilmente.

Sugiere, que los edificios transparentes no son espacios para sociabilizar y pasar el tiempo. Son espacios más frios y que no transmiten su historia.

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El cristal no refleja la historia de las ciudades

Continuando, Davison hace mención al siguiente ejemplo:

Los edificios pueden ser como las personas, sus caras reflejan su experiencia.

Los otros materiales pueden absorver la historia, la memoria de una ciudad y proyectarlas en el presente a través de la construcción. En cambio el cristal no lo puede hacer.

El museo natural de Utah, en Salt Lake City, ha sido construido en cobre y zinc. Estos minerales han sido extraídos en la zona por más de 150 años y refleja así, la historia natural de la región.

Además, la construcción moderna se camufla perfectamente con el paisaje.

Davidson propone redescubrir las joyas de las texturas en las construcciones modernas, poder combinar materiales antiguos y nuevos. Incluso destaca modelos de viviendas sostenibles. Construcciones que incorporan el cristal a paneles de vegetación que mejoran el aire de la ciudad.

¿Tu que opinas sobres las torres de cristal? ¿Crees que afectan a la historia de una ciudad o son parte de ella?

No olvides de compartir y dejar tu comentario, queremos leer tu opinión.

Información e imágenes: Medium